Itacaré conjuga, como pocos lugares, diversión, buena comida, variedad de alojamientos, buenas playas, naturaleza exuberante y miles de posibilidades de pasártelo bien.
Es posible realizar, también, muchas excursiones: ver los manglares, la zona de protección medioambiental APA, subir por el río Contas, llegar a la Lagoa do Cassange, bañarse en Taipu de Fora, visitar Barra Grande, acercarse a Serra Grande y recorrer cualquiera de las playas del sur.
Las playas las hay para todos los gustos, salvajes, surferas, vírgenes, tranquilas, para familias.
Playas paradisíacas como la de Jeribucaçu, Engenhoca o Prainha.
A Itacaré se va para divertirse y pasárselo bien. ¡Buen viaje!. Nosotros estuvimos hace unos años y no creo que haya cambiado mucho desde entonces.
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