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11 diciembre, 2023

Xert, en Castellón

Entre Vinaroz y Morella, a pocos kilómetros de la localidad castellonense de Sant Mateu, se localiza la población de Xert. Está muy próxima a la serranía de la Pobla de Benifassà y al pico Turmell (1276 metros de altura). En una zona agrícola y ganadera, cerca del pueblo puedes ver las granjas.


Xert (Chert) no llega a los 800 habitantes pero en verano, como en todos estos pueblos pequeños del Bajo Maestrazgo, esta cifra se duplica.


Xert es tranquila y cómoda de recorrer, porque la parte más nueva urbanizada se ha construido en cuadrícula de calles anchas y cerca de la zona del polideportivo y de la piscina municipal. Las casas son grandes en conjunción con las amplias calles y avenidas. Por contra, según nos acercamos al centro histórico las calles se estrechan. El urbanismo va cambiando en la zona de la judería. Este núcleo es más antiguo y hasta hace unos años era una total ruina. Finalmente, la zona de la judería se ha recuperado y se han rehabilitado muchas de sus casas. También se ha reconstruido su trazado laberíntico y el pavimentado de las calles. El pavimento es rústico y muy interesante. Es decir, hay dos zonas muy diferenciadas urbanísticamente en Xert: la medieval y la de nueva construcción. Por lo tanto, en Xert hay dos iglesias: la nueva y la vieja -la iglesia de la Asunción- y dos plazas: la Plaça Vella y la Plaça Nova. En Xert, todo se duplica.




Desde la zona de la morería y judería parten senderos para realizar diferentes recorridos por los montes de sus alrededores. El paisaje es variado. En las áreas más cercanas a la villa, pueden observarse cultivos de almendra, olivos, higueras y viñas. En las montañas, zonas de pinos salpicados de encinas.




Uno de los paseos bonitos y fáciles que se puede hacer es el de llegar caminando hasta la Fuente del Molinar. El recorrido de esta ruta es de 3 kilómetros de ida y otros tantos de vuelta. Nosotros lo hicimos pasando por la calle Fredes y la calle Cap de la Vila (calles empinadas de la judería). Tras dejar atrás el pueblo y pasar cerca del cementerio de Xert nos pusimos en ruta hacia la fuente del Molinar. De hecho, allí se sitúa el anuncio del sendero.


Tras la caminata, comimos en el restaurante Ram-sol. Comida muy gustosa, limpio y sencillo restaurante a precios ajustadísimos para la calidad del producto. Pensamos volver otro día.

2 comentarios:

Paco Piniella dijo...

Curiosamente es Castellón una provincia que siempre he desechado de mis viajes, no sé por qué, quizás con el convencimiento de que no tiene un gran patrimonio, pero veo que estoy equivocado.

CarmeLa dijo...

Hola, Paco
Sí, Morella vale la pena conocerla. Pero, Morella queda muy a trasmano.

Acabo de llegar de un viaje por Úbeda y Baeza. Sí que tienen patrimonio. Sus centros históricos son espectaculares y también, están muy cuidados.

Aprovecho el día para desearte feliz Navidad para ti y para los tuyos.

¡Salud y viajes!