Es relativamente sencillo alquilar un coche en Cuba y recorrer la isla de punta a punta, o de playa a playa. Siempre hay mucho por ver: La Habana, Pinar del Río, El Valle de Viñales, Cienfuegos, Trinidad, María la Gorda, los Cayos, Caleta Buena, Playa Larga, Holguín, la Península de Zapata, Santiago de Cuba y muchos lugares más.
No puedo decir que es lo que más nos impactó de nuestro viaje a Cuba, en realidad fueron muchas cosas las que nos dejaron huella. El pueblo cubano, su gente, nos gustó mucho. Su carácter fuerte y simpático. El ingenio y la creatividad cubana. La naturaleza indómita de la isla, los cayos de arena blanca y su arquitectura urbana y rural. Los pequeños pueblos costeros y las ciudades, pero entre todas las ciudades que vimos nos fascinó sobre todas ellas: Cienfuegos.
Cienfuegos es una ciudad increíble. Su estructura urbana en cuadrícula conforma un trazado moderno y limpio. Los edificios neoclásicos son de una belleza y dimensiones únicos. Cienfuegos es conocida como la Perla del Sur y en el 2005 fue declarada Patrimonio Cultural por la Unesco. Espectacular es el Palacio de Valle y bonito el parque José Martí.
Nosotros nos alojamos en el Hotel Unión. Un edificio neoclásico con amplias habitaciones. Estaba en pleno centro de la ciudad.
También, nos gustó mucho la ciudad de Trinidad, aunque no era ni mucho menos tan grande ni sorprendente como Cienfuegos. Sin embargo, el frente marino de Trinidad es muy bello. Tiene una larga playa de arena blanca, la playa Ancón, con el agua muy limpia y en la que puedes concertar excursiones de buceo o snorkel. Desde esa misma playa, te llevan en barco hasta el arrecife para hacer buceo.
En Trinidad, nos alojamos en el hotel Brisas Trinidad del Mar.
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