Desde la carretera que une Limin Ierakas con Géfira habíamos visto al pasar una bonita playa de arena dorada. Así que decidimos darnos el baño allí, en Pori beach.
La playa detenta la bandera azul. Cuenta con duchas, hamacas, sombrillas, una zona para jugar al voleibol y a las palas, un chiringuito, dos restaurantes y cubos de basura para el reciclaje.
La playa tiene varios kilómetros y una forma de gran bahía. En algunos tramos, hay árboles y en
otros solo arena dorada.
Es animada,
aunque no muy concurrida. Playa familiar y para gente joven, sobre todo la zona
en dónde se halla el chiringuito.
Por las tardes, cuando el sol no estaba tan fuerte acudían familias con niños más pequeños. También observamos que muchos jóvenes aparecían por allí, por las tardes, después de finalizar sus jornadas laborales.
Por las tardes, cuando el sol no estaba tan fuerte acudían familias con niños más pequeños. También observamos que muchos jóvenes aparecían por allí, por las tardes, después de finalizar sus jornadas laborales.
El sol del mediodía
era intenso y la playa parecía, como no hacía viento, una gran balsa de agua
azul celeste en la orilla y de azul griego, en el horizonte.
Nuestras hamacas eran
comodísimas y el parasol nos protegía del intenso sol. Pasamos allí todo el
día, tomando cervezas frías con poca gradución alcohólica, hasta el anochecer.
Hicimos un necesario receso para comer, en el restaurante Ο Άθας, en Agios Ioannis, pero en
realidad, estábamos deseando volver a nuestras hamacas en Pori beach.
Volvimos a Pori
beach todos los días durante nuestra estancia en la zona, algunos días fuimos
a comer a Agios Ioannis y uno de los días nos quedamos a comer en Limin Ierakas en el
pequeño restaurante del puerto: To Remetzo. Es el típico restaurante para comer pulpo a la brasa o en vinagre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario